El fenómeno mundial 50 Sombras de Grey llega
a la gran pantalla y nos cambia por completo la imagen que teníamos del príncipe
azul creada, mayoritariamente, por las antiguas y clásicas películas Disney.
Con colas kilométricas y miles de entradas de cine
vendidas antes del estreno, esperábamos ver una película con alto contenido
sexual y explicita que, cuando sales de la sala de cine, te das cuentas que
todo el sexo del que hablan en los libros queda en un segundo plano en la adaptación,
dándole más protagonismo a los vergonzosos e intensos encuentros entre el Señor
Grey y Anastasia Steele acompañados
por conversaciones que acaban resultando cómicas en vez de charlas cargadas de
mensajes sexuales.
Jamie
Dornan (Christian Grey) se mete en el papel del joven
magnate multimillonario rodeado por una
luz y cincuenta sombras que lo atormentan y le hacen ser quien es. Con una
actitud inquietante y tersa, una mirada sexy que hace estremecer a más de un espectador
y unos juegos eróticos de lo más extraños nos muestra a este nuevo tipo de príncipe
encantador empeñado en encontrar una sumisa que esté dispuesta a complacerle. Parecía
complicado sacar a Christian Grey de los libros e intentar personificarlo, pero
esta vez el actor Jamie Dornan ha sabido complacer a los muchos fans deseosos
de ver la película.
En ciertos momentos veíamos al actor en una pose
distinta a la imaginada y resultaba un poco aburrido o agobiante pero Jamie
sabe cómo hacer que esos momentos pasen rápido y enseguida uno recupere el hilo
principal de la película y se quede con la boca abierta con tres palabras bien
dichas en el momento idóneo.
Con una mirada penetrante y cautivadora y pasando más
tiempo sin camiseta que con ella el Señor Grey consigue satisfacer los deseos
de Anastasia pero sobre todo los de los ojos penetrantes situados en la sala de
cine que en ocasiones ni pestañean para no perderse ni un solo segundo.
A pesar de que las escenas de sexo no eran las
esperadas y que no han conseguido escandalizar a un público curado de espanto,
aun se puede ver como las parejas que deciden ver la película coquetean, ríen y
planean como pasaran su tiempo al llegar a casa consiguiendo el objetivo
principal de la película, seducir al espectador.
Dakota
Johnsons (Anastasia Steele) pone el toque picante, sensual,
divertido, enamoradizo y la evolución de una “mosquita muerta” a una mujer que
ama su cuerpo y que pierde el miedo por el mundo que le rodea. Al contrario que
su compañero de reparto, Dakota pone el punto x a la película haciendo que sea
para mayores de 18 mostrando sin ningún pudor cada uno de los pelos que rodea
su cuerpo en varias ocasiones.
Juguetona, coqueta y vergonzosa es cómo podríamos definir
a Anastasia. Con un tira y afloja constante con Grey nos muestra una cara
divertida y pasota durante todo el filme. Parecía imposible que en una sola película el
espectador pudiera sentir varias emociones pero Dakota Johnsons consigue que el
espectador se ruborice y se cabree, en ciertas ocasiones, con Christian Grey,
consiguiendo así y de esta manera quedarnos sorprendidos y darnos cuenta de
quién es la verdadera estrella en esta película, a pesar de los intentos de
Jamie Dornan de querer captar todas las miradas cada vez que se desnuda.
Pero si hay algo más sorprenderte y que nos deja con
la boca abierta es la fotografía de la película. Cada detalle esta cuidado al milímetro
dejándonos ver lo que quieren que veamos. Las escenas de cama son elegantes y
atractivas pero nada parecidas a lo que nos rondaba en la imaginación. Con primeros
planos sorprendentes que nos meten en la piel de los protagonistas y nos dejan
sentir las emociones de los actores nos hace darnos cuenta del gran equipo de producción
con el que cuenta Cincuenta Sombras de
Grey. Escenas míticas como el viaje en avioneta con los dos protagonistas o
la reunión para firmar el contrato entre Anastasia y Christian dejan en nuestro
cuerpo una gran sensación consiguiendo,
sobre todo erizarnos y amar el juego de luces.
Cincuenta
Sombras de Grey se convierte de esta manera en una película
cómica (sin pretenderlo) y sexy estimulando la imaginación de cada uno de los
espectadores que se dirigen al cine a ver el filme. No se convierte en la mejor
película del año pero si en una buena forma para pasar el tiempo y si no
sabemos qué ver, Cincuenta Sombras de
Grey es la elección perfecta.
Si aún no la has visto, te dejamos a continuación el Tráiler:
No hay comentarios:
Publicar un comentario